Iroha, una bella y guapa esposa con un bonito cuerpo, espera a que su marido regrese a casa vistiendo un uniforme de marinero de su época escolar, con la esperanza de darle vida al sexo que no ha tenido en mucho tiempo. Entonces aparece Kenji, el hijo del vecino, y tiene una erección debido a su apariencia linda y lasciva. La esposa tiene un deseo lujurioso por la gran polla del joven y le duele mucho la entrepierna. Se lame los pechos, abre su coño mojado y obsceno y chupa lascivamente la gran polla del hijo de al lado.