¡Buenos días!, ¡Mei Mitsuki, que acababa de llegar al lugar, fue agarrada por el director que esperaba! ! Aprovechando que el director no estaba, cuando estaba a punto de explicarles los detalles del rodaje, los hombres irrumpieron e intentaron dejar pasar a mi sobrina. Lamió mi cuerpo sudoroso, a pesar de que no me había duchado, hasta el interior de mi ombligo.