Mi novia, con quien vivo, volvió a casa de sus padres por tres días. La amiga de mi novia, Elisa, vino a ver cómo estaba para que no la engañara... Aunque sabía que estaba mal engañarla, estaba pegada a los voluptuosos pechos copa G de Elisa... Si pudiera contenerme por dos días hoy y mañana... Puedes tener sexo conmigo el último día ♡” Solo puedo decir “sí” a esta propuesta inesperada, así que me detengo de follarla mientras lo hacen.