Han pasado seis años desde su debut, y Nanako Mori, que debía saberlo todo sobre sexo, ahora abre la puerta a un mundo nuevo. Ella olvida que la están filmando y se muestra tan lasciva que no ve la hora de empezar a follarse mientras le chupa vulgarmente el pene erecto. Si le aplicaran un masajeador eléctrico, el chorro de agua en forma de cascada se confundiría con incontinencia. Durante el sexo tan esperado, ella parece saltar arriba y abajo.