Madoka es una mujer casada de 37 años, pero su único hijo ya es adulto. Ella no se ve así desde fuera, más bien es una esposa sexy y hermosa que está llena de feromonas. Si te gustan las mujeres maduras te encantará. Sin embargo, lo sorprendente es que no ha tenido relaciones sexuales desde que se convirtió en adulto. Aunque es tan hermoso... ¡Ella explota su ira reprimida...!